16 de enero de 2011

El duro trabajo de no tener una 38

Hace unos días, visitando diversos blogs de moda con mi consorte, nos encontramos con unas declaraciones que Karl Lagerfeld realizó en el 2009. Dichas declaraciones venían a decir, a grosso modo, que nadie quiere ver modelos gordas en una pasarela, y que los modelos de pasarela para nada inducen a la anorexia. Dicho todo esto en un contexto de polémicas continuas, precisamente, sobre la extrema delgadez de las modelos de alta costura.

Ya de por sí, estas declaraciones me parecen un absurdo en sí mismas, sobre todo si tenemos en cuenta que el tallaje de estas mujeres (preparadas para tal trabajo) es increíblemente más bajo que el tallaje de una mujer media. Y aquí es a donde yo quiero ir a parar. A las tallas que luego se ven en las tiendas, que son las que, precisamente, puede vestir una mujer media.

Me parece, cuanto menos, incomprensible, que siendo la 44 la talla media de la mujer europea, haya tiendas que rara vez vendan algo más allá de la talla 42. Y otras, que no se dignen a tener algo parecido a la 40. Porque vale, las modelos son extremadamente delgadas y usan tallas de niña (alrededores de la 32), pero como he dicho antes, las modelos no dejan de estar "preparadas" para llevar esa ropa, distando mucho de ser precisamente una mujer "normal".

Lo cual me lleva a una peligrosa cuestión... Veamos. Si hago un acto de fe, puedo llegar a entender que, en una pasarela, una mujer con curvas de más (y tampoco estoy diciendo que pese más o menos, simplemente que tenga curvas de mujer) puede que no interese porque sus "atributos" puedan desviar la atención de lo que importa en ese momento, que no es otra cosa si no el vestido que lleva. Vale, perfecto. Pero si hay una cosa que es especialmente evidente en el mundo de la moda, es que tales extremos de delgadez y suplicio, hacen que las modelos tengan un aspecto de todo menos de estar felices y saludables. Más bien, al contrario. Y eso, como diría cierto personaje del cine, es evidente a los vidrios.

Dicho lo cual, y dejando de lado a los grandes "gurús" de la moda, yo me pregunto: ¿Desde cuándo, y por qué, se ha extrapolado ese precario estado de salud de las modelos a ser un canon de belleza?

Porque, precisamente, para el señor Lagerfeld (el cual hace años no era precisamente una sílfide... de ahí que siembre lleve cuellos altos, para esconder todo el pellejo que le sobra) una mujer con una talla 44 estaría "gorda, con sobrepeso y con ansias de quitárselo" cuando, para el inmenso resto de los mortales, puede ser toda una mujer hecha y derecha y a la que no le sobra absolutamente de nada. Incluso más bien al contrario.

Pero en fin, que si tenemos que hacer caso de lo que nos dicen "gurús" de la moda, como el citado Lagerfeld, toda mujer que se precie debería seguir el ejemplo de Isabelle Caro:



siendo Crystal Renn:


el ejemplo perfecto, de nuevo bajo el "consejo" Lagerfeld, de lo que toda mujer debería evitar a toda costa. Y sinceramente camaradas, para mí, hombre medio del mundo medio, no hay color. Y ambas son modelos.

Pero como ya he dicho, esto es lo que lo que dicen los gurús de la moda. Hombres a los que, dicho sea paso, poco les interesa el cuerpo de una mujer (no pretendo ser homófobo, pero es que maldita sea la casualidad, la inmensa mayoría, por no decir todos ellos, son homosexuales). Insisto, que no tengo nada en contra de su orientación sexual, pero me parece cuanto menos macabro el interés que demuestran estas personas en mostrar mujeres que parecen cualquier cosa menos una mujer, con unos cuerpos y unas caras que distan muchísimo de parecer saludables. Y peor aun, que el resto de hombres y mujeres del mundo les hagan caso y les crean sólo por tener esa aureola de "autoridad" sobre sus cabezas. Sólo espero que no sean muchos, ni muchas, los que se dejen engañar precisamente por una autoridad que nadie les ha concedido. Se puede ser muy experto en una materia, pero eso no evita que se pueda estar igualmente equivocado.

Yo, desde luego, tengo muy claras mis preferencias.



Pd.- A modo de nota informativa, Crystal Renn sufrió de anorexia en sus primeros años de modelo, acabando por superarla y luciendo un aspecto algo más saludable que el de Isabelle Caro, la cual, por cierto, falleció en Tokyo el noviembre pasado, precisamente debido a la anorexia.

2 comentarios:

Viana dijo...

Opino exactamente igual que tú. Y mira que soy delgadita y uso una 34-36 que por tallas, yo no tengo problema. Pero es que mi aspecto, para mi gusto, estaría mucho mejor con unos cuatro kilitos más, porque yo me miro al espejo y me veo mu canija! y digan lo que digan es mucho más bonito una chica con curvas que una esquelética!! y te lo dice alguien que se supone que tiene un "buen cuerpo"... Pues yo pienso que tendría uno mejor si estuviera más gordita, las cosas como son :D

Así que como "propósito" de cumpleaños (porque yo no hago propósitos de año nuevo, sino metas a alcanzar antes de mi próximo cumple) me voy a proponer engordar lo que pueda!! :D espero conseguirlo!!!

Un besazo y buen post!!

Tillocai dijo...

Vivan las curvas, para mi tampoco hay color, la modelo de abajo es una modelo auténtica y preciosa.
Yo con las tallas tengo una lucha interna, la madre de ana me ha regalado una camisa y lo primero que hice fue ver la talla ES UNA M mi reacción "esto no va a entrar", pues no solo entra, si no que pa colmo me está hasta un poquito grande. Las tallas deberían estar reguladas por ley.
Pero este problema seguirá existiendo, mientras las grandes firmas de ropa, nos digan que debemos y no debemos vestir